El desarrollo sostenible y el mercado de bonos verdes

El mercado de bonos verdes, que en años recientes ha surgido como un eslabón clave para las finanzas sustentables, ha comenzado a adaptarse en respuesta a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Aunque las segundas opiniones en el mercado de bonos verdes en los últimos años se han referido típicamente a la alineación del bono con los Green Bonds Principles, algunos ya empiezan a referirse a los ODS.

Durante 2017 se incrementó la selección de ODS como mecanismo de medición en el mercado de bonos verdes y sociales. El primer bono vinculado a los ODS fue emitido por el Banco Mundial en marzo, recaudando €163 millones de inversionistas institucionales en Francia e Italia. Sus rendimientos están vinculados directamente con el desempeño del Índice Mundial de los Objetivos de Desarrollo Sustentable de Solactive, el cual incluye a más de 50 compañías que dedican una quinta parte de sus actividades a productos sustentables, o bien, son líderes reconocidos en sus industrias en sustentabilidad social y ambiental.

La oferta del Banco Mundial fue seguida por una emisión de un bono de Desarrollo Sustentable de $1 billón por el banco inglés HSBC en noviembre, el primer bono relacionado a ODS por un emisor corporativo, y estructurado de manera similar a un bono convencional de uso de los recursos, con presentaciones anuales de reportes que confirmarán si los recursos son asignados de acuerdo a un marco establecido. HSBC aseguró que los recursos serán usados para cumplir con siete de los 17 ODS:

  • Incrementar el acceso a cuidados de salud esenciales (ODS3: buena salud y bienestar), educación (ODS4: educación de calidad), agua limpia y sanidad (ODS6);
  • Construcción de ciudades (ODS11: ciudades y comunidades sustentables) y sistemas de transporte sustentables (ODS9: industria, innovación e infraestructura); y
  • Ayudar a comunidades a adaptarse a los efectos del cambio climático (ODS13: acciones climáticas).

Para poder ser elegibles, las empresas o proyectos deben destinar por lo menos el 90% de sus ingresos de actividades que se encuentren en línea con los ODS. Las empresas elegibles pueden usar los préstamos para propósitos corporativos generales, siempre y cuando estos no sean usados para el financiamiento de sectores que no sean elegibles.

La generación de energía nuclear, armas, alcohol, apuestas, entretenimiento para adultos y aceite de palma están excluidos.

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