El sistema de comercio de emisiones mexicano: desafíos y trascendencia

 

 

Ciudad de México a 9 de octubre de 2019.- Dos semanas atrás, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) de México emitió las bases del mercado de carbono, es decir, del sistema de comercio de emisiones (SCE) del país. Este evento no es para nada menor: se trata del primer SCE en Latinoamérica y el tercero en un país en vías de desarrollo, luego de Kazajistán y los múltiples pilotos chinos, que serán incorporados en el esquema nacional. No obstante, resulta remarcable que el país incorpore a sus políticas ambientales, la herramienta de política climática más costo efectiva para mitigar sus emisiones de gases de efecto invernadero.

El SCE mexicano enfrenta múltiples retos que deben ser afrontados por SEMARNAT, pero también por las diferentes partes ahora convocadas a contribuir al éxito de la política climática como lo son: las empresas del sector público y privado que se encuentran cubiertas por las obligaciones, los reguladores ambientales y financieros que deberán adaptarse a las nuevas responsabilidades y los verificadores de emisiones que verán aumentar los retos a los que se enfrentan todos los años, trabajando bajo el actual Registro Nacional de Emisiones (RENE). Sin menosprecio de lo anterior, cabe resaltar algunos desafíos particularmente complejos:

Fijación del límite de emisiones: el nivel de ambición del límite de emisiones (o “cap” en inglés) es fundamental para el éxito del programa. Un límite demasiado bajo se traduce en pocas reducciones. Un límite demasiado alto aumenta el costo de cumplimiento y podría perjudicar la competitividad de las empresas cubiertas.

Capacidades de los participantes: como cualquier mercado, es central que las empresas cubiertas comprendan a cabalidad las reglas del esquema. Durante los próximos meses advendrá el desafío de remontar una empinada curva de aprendizaje. Si bien se contempla la participación de alrededor de 70 empresas durante la fase piloto, en las mesas de trabajo entre el sector público y privado para definir las reglas de mercado la participación de las compañías fue considerablemente menor.

Infraestructura de mercado: para el diseño de un esquema exitoso también será crucial que la infraestructura de mercado se encuentre rápidamente en funcionamiento. Es fundamental contar con un registro de permisos de emisión fiable, bajo los más altos estándares de calidad internacional y con plataformas de intercambio que garanticen la máxima seguridad para compradores y vendedores, tanto en el mercado primario (subastas) como el secundario.

La emisión de las reglas de mercado es un paso importante en la historia de la lucha contra el cambio climático en México. No sólo está en juego el camino para la reducción de emisiones en la economía más industrializada de América Latina.  Esta medida también influirá fuertemente en el destino de los SCE en desarrollo en el resto de la región: las iniciativas nacientes en Argentina, Brasil, Jamaica, Panamá, República Dominicana, además del esquema de reducciones en Costa Rica, la compensación de emisiones con reducciones certificadas (bonos de carbono) en Chile y la futura aparición del SCE chileno y colombiano.

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